Plagiocefalia
En este artículo, exploraremos la plagiocefalia, una condición que afecta la forma del cráneo en bebés.
Desde su definición hasta los tratamientos fisioterapéuticos, abordaremos cada aspecto crucial para comprender, prevenir y corregir esta afección.
Acompáñenos en este viaje informativo donde destacaremos la importancia de la detección temprana, exploraremos las causas y factores de riesgo, y nos sumergiremos en las opciones de tratamiento.
¿Qué es la plagiocefalia?
La plagiocefalia es una condición que afecta la forma del cráneo, caracterizada por una deformidad asimétrica en la cabeza. Esta alteración puede presentarse de dos maneras principales: la plagiocefalia congénita o posicional
La plagiocefalia posicional es la forma más común y suele manifestarse cuando un bebé pasa demasiado tiempo en una posición específica, como acostado siempre del mismo lado.
La plagiocefalia congénita, es de nacimiento. Y se produce por haber estado mal encanjado sobre uno de los lados durante el embarazo. O al salir por el canal del parto.
Esta presión constante puede provocar aplanamiento en un área del cráneo, resultando en una forma irregular. Aunque la plagiocefalia posicional no está asociada con problemas neurológicos graves, es esencial abordarla temprano para prevenir complicaciones a largo plazo.
Por otro lado, la craneosinostosis es menos común y más grave. Esta condición se origina cuando una o más suturas craneales, que son las uniones entre los huesos del cráneo, se cierran prematuramente (es decir, el cierre prematuro de suturas).
Esto restringe el crecimiento natural del cráneo, provocando deformidades más pronunciadas y potencialmente afectando el desarrollo cerebral. A diferencia de la plagiocefalia posicional, la craneosinostosis suele requerir intervención quirúrgica para corregir las suturas cerradas y permitir un crecimiento del cráneo adecuado.
Causas y factores de riesgo
Las causas de la plagiocefalia son diversas y, en gran medida, están relacionadas con la presión constante ejercida sobre la cabeza de los recién nacidos y lactantes durante sus primeros meses o semanas de vida.
Una de las principales causas es la posición al dormir, especialmente cuando los bebés pasan largos periodos acostados sobre un lado específico de la cabeza como por ejemplo el lado derecho de la cabeza.
Esta presión repetida puede resultar en aplanamiento del cráneo del bebé y contribuir al desarrollo de la plagiocefalia posicional.
Además, el tiempo prolongado en posición supina, es decir, boca arriba, también se ha asociado con un mayor riesgo de plagiocefalia.
Aunque esta posición es crucial para reducir el riesgo de síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL), es esencial equilibrar con periodos de tiempo en posición prona (es decir, cambiar la posición), colocarlo boca abajo, cuando el bebé está despierto y bajo supervisión.
La falta de variabilidad en las posiciones puede aumentar la presión en áreas específicas del cráneo, contribuyendo así al desarrollo de deformidades o alguna malformación.
Otros factores de riesgo incluyen la preferencia natural del bebé por una dirección al mirar o girar la cabeza, es decir, bebés que nacen con una tortícolis, lo que puede llevar a una distribución desigual de la presión. Las condiciones prematuras o músculos del cuello tensos también pueden influir en la forma del cráneo.
Signos y síntomas de la plagiocefalia
Los signos y síntomas de la plagiocefalia en bebés son clave para una detección precoz y un abordaje efectivo. Visualmente, la plagiocefalia posicional se manifiesta con un aplanamiento asimétrico en el cráneo, donde una parte puede aparecer más plana o prominente que la otra.
La cabeza puede tener una forma triangular o asimétrica cuando se observa desde arriba. Además, es posible notar un desplazamiento de las orejas, ojos y mandíbula, indicando una distribución desigual de la presión sobre el cráneo.
En términos de síntomas, los bebés con plagiocefalia posicional pueden mostrar preferencia por girar la cabeza hacia un lado específico al estar despiertos, lo que contribuye a la asimetría facial y craneal.
Pueden experimentar limitaciones en el movimiento del cuello y presentar irregularidades en la alineación facial.
La detección temprana es fundamental, ya que permite intervenir de manera efectiva y corregir la forma del cráneo mientras el tejido óseo aún es maleable. Si no se aborda adecuadamente, la plagiocefalia puede llevar a complicaciones a largo plazo, como problemas en el desarrollo facial y posiblemente afectar la alineación de la columna vertebral, desarrollo motor asimétrico, etc.
Tratamientos fisioterapéuticos
Los tratamientos fisioterapéuticos para abordar la plagiocefalia en bebés, se centran en opciones que promueven el desarrollo saludable del cráneo y previenen complicaciones a largo plazo.
Uno de los pilares fundamentales de los tratamientos en Fisiomaternal es la terapia de posicionamiento. Esto implica enseñar a los padres a realizar ajustes en la posición de descanso del bebé, promoviendo una distribución más equitativa de la presión en el cráneo.
Estas recomendaciones incluyen cambios en la orientación durante el sueño, alternando la posición de la cabeza y fomentando la variabilidad postural cuando el bebé está despierto.
Además, hay ejercicios específicos diseñados para fortalecer los músculos del cuello y la cabeza. Estos ejercicios contribuyen a mejorar la movilidad y la resistencia, ayudando a corregir la asimetría causada por la plagiocefalia posicional.
Los fisioterapeutas guían a los padres en la realización adecuada de estos ejercicios, asegurándose de que sean seguros y efectivos para el desarrollo psicomotor y cognitivo del bebé.
Lo más importante siempre será el tratamiento por un fisioterapeuta pediátrico especialista en deformidades craneales que realizará técnicas indoloras de modelaje en la cabecita del bebé.
Cuanto antes se revise y trate al bebé mejor será su pronóstico.
El enfoque personalizado también puede incluir el uso de almohadas especiales o dispositivos de posicionamiento que ayudan a mantener una forma adecuada del cráneo durante el sueño.
¿Cómo prevenir la plagiocefalia?
Es crucial abordar la plagiocefalia temprano, ya que puede afectar el desarrollo craneal, por lo que el enfoque integral tiene que incluir recomendaciones para ayudar a prevenir la plagiocefalia, como fomentar que los lactantes cambien de lado al lado contrario durante el sueño y eviten pasar mucho tiempo en el lado aplanado.
En casos más severos o de deformidades craneales posicionales, nuestro equipo de fisioterapeutas expertos utiliza técnicas especializadas para tratar la plagiocefalia y corregir la posición del cráneo en recién nacidos.
Hay que entender que la plagiocefalia puede estar vinculada a alteraciones neurológicas, por lo que nuestro equipo realiza un diagnóstico preciso y personalizado.
En Fisiomaternal, por ejemplo, estamos comprometidos a brindar atención de calidad para evitar la plagiocefalia y tratar los casos de deformidades craneales, asegurando el bienestar y el desarrollo saludable de los más pequeños.
